4 de julio de 2009

Nuestros pueblos en el Norte de Castilla

En el Norte de Castilla están publicando unos reportajes en los que hablan de los pueblos de Segovia, de su historia, de sus costumbres y de su situación actual.
Iré poniendo algunos detalles de los pueblos cercanos que me han llamado la atención o me han parecido curiosos...

Comenzamos con San Miguel de Bernuy, que para eso son vecinos..



Belleza monumental y paisajística

San Miguel de Bernuy se encuentra situado en un paso estratégico de carreteras entre Segovia, Aranda de Duero, Sepúlveda y Fuentidueña. Unas vías de comunicación que permiten llegar a una de las localidades de la provincia que tiene un encanto especial, tanto por su patrimonio cultural como natural ya que dentro de su término municipal comienzan las hoces septentrionales del Duratón.

Desde el área recreativa de los Nogales se observan los farallones calizos que acompañan al río en su lento discurrir hacia el embalse de las Vencías. Poco a poco la ribera va desapareciendo cediendo su espacio al agua que cubre el valle entre los muros. Cada curva o cada hoz está flanqueada por imponentes paredes calizas de varios metros de altura en cuyos huecos vive una importante colonia de buitres leonados. Un paraje espectacular que se puede disfrutar de muchas maneras. Una de ellas es por el agua, ya que toda esta zona se puede recorrer en piragua o barca.

Otra de las posibilidades es realizarla a pie, con lo que el caminante puede disfrutar de una de las sendas más espectaculares de la provincia que conducirá hasta la villa de Fuentidueña, a través de las Hoces del Duratón.

En este entorno se localizan los restos de tres ermitas románicas. En el margen derecho se localizan 'Los San Pedros' y 'Los San Martines', templos que en su día tuvieron grandes dimensiones por lo que los estudios barajan la posibilidad de que fueran parroquias de uno o más barrios de San Miguel, una importante población al menos durante la Edad Media.


En el margen izquierdo se levantan los viejos muros de 'Las Ermitonas', la única ermita de los entornos que tuvo muralla defensiva. Antaño se veneraba en este lugar a la Virgen del Río.
Precisamente a los templos se les quitaron los sillares y piedras labradas para aprovecharlas en otras construcciones, como la ermita de la Virgen del Río, que se alza a las afueras, junto a la carretera de Cobos de Fuentidueña.

Dentro del pueblo también se localiza la iglesia de San Miguel. Su cabecera es un elemento singular del románico segoviano. Se trata de una gran torre de planta rectangular que albera en su interior la escalera y el presbiterio. El conjunto resulta de una monumentalidad tal que está muy alejado de lo que se puede considerar románico rural. La nave, la sacristía y la portada de ingreso son de mediados del siglo XVIII.

También es barroco el retablo mayor, construido en tres calles, dorado y policromado. Es una obra de gran belleza y calidad. Precisamente, hace relativamente poco tiempo han concluido las obras de rehabilitación de la iglesia.

En San Miguel de Bernuy también merece la pena visitar su puente del siglo XVIII, aunque su origen puede que fuera medieval.

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